Día 20: Carta a una Mosca

Hola Plaguita,

Creo que la primera vez que te conocí lo hice de la peor manera posible. Solo puedo recordar tu aspecto asqueroso y dañino al verte en la película llamada la mosca. Allí te pude apreciar en tu máximo esplendor y debo decirte: Guacatela.

No creo que puedas convencerme de que tengas algún tipo de misión especial en este mundo, y aunque estoy segura que existen, me rehuso a indagar por miedo a ver tu imagen en HD.

Te he visto descender en cámara lenta y arruinar los mejores platos. También te he visto rodeada de tu comida preferida, que no precisamente tiene fama de oler rico.

Me sorprende observar que aquí en Chile su velocidad cambia. Son muy lentas y rara vez me las encuentro. Que alegría me da el poder dejar mi plato al aire libre sin tener que preocuparme por ustedes.

Me da fobia todo animalito volador, y más aún si veo a mi hijo comiéndose a una de ustedes. Eso fue lo último que llegue a ver, y espero que no vuelva a suceder.

Prefiero recordarlas como pequeños puntitos voladores, que ponerme a analizar lo impresionante de su aspecto.

Espero que cambien su menú diario y sigan el ejemplo de esas amigas que solo comen frutas.

Atentamente,

Entomofobia