Día 6: Pesadillas Consigna: Escribe tu pesadilla recurrente

Lo bueno de las pesadillas es que siempre podemos despertar y cambiarlas a nuestra conveniencia. Sin embargo, hay unas que nos dejan una sensación incomoda por algunas horas e incluso días.

Siempre me molesta esa pesadilla en la cual se me aflojan los dientes y se me caen, me despierto con esa extraña sensación de no tenerlos, e inmediatamente corro al baño para examinar delante del espejo si efectivamente están allí.

Tampoco me gusta escuchar a mi mamá lamentarse porque soñar que se cae una pieza

dental, significa en el mundo real la muerte de un ser querido.Pero existe una pesadilla que a mi parecer es la peor de todas y es aquella que sucede cuando tomo pequeñas siestas en la tarde. Esto no lo hago casi nunca de manera voluntaria, precisamente porque trato de evitarlas.

Generalmente suceden cuando estoy muy agotada y sin darme cuenta me quedo profundamente dormida. Entonces pasa que me despierto y puedo ver todas las cosas a mi alrededor, pero no puedo moverme, me encuentro totalmente paralizada.Inmediatamente me levanto, pero existe una fuerza que me empuja para atrás y no puedo levantarme. Luego trato de gritar y la voz no me sale. Nadie puede escucharme a pesar de estar allí.

Entonces me da tiempo de pensar que esto es una pesadilla, que me ha pasado antes y que debo calmarme cerrar los ojos y tratar de respirar.

A veces me funciona y despierto en la misma posición de antes, con el corazón acelerado y moviéndome lentamente para verificar que no estoy paralizada nuevamente. Pero existen otras en que esta vuelve a repetirse hasta dos veces en

el mismo sueño antes de finalmente despertar.